miércoles, 20 de julio de 2011

Que bonito fué volver a sentirte

14 de Julio de 2011,una fecha que siempre recordaré.
Fueron duras las horas previas,la presión de volver a verme sobre tu alcalareño albero me acia estar despierto,tenso y nervioso,era mucha la responsabilidad que soportaba.
En la foto,echa en la habitación del hotel,estoy junto a mis compañeros de cuadrilla,mi amigo Richarte y mi Lipi.
Era mucha la tensión que se respiraba,creo que a todos nos podía la idea de estar mal esa tarde.
Sinceramente no me é mentalizado tanto por una tarde,pero para volver a pisar mi querida Maestranza debía de ser así,ir mentalizado,ir sabiendo donde iba.
Bajo las ordenes del novillero sevillano Martín Carmona,aria mi primer paseillo como banderillero en la Maestranza Sevillana.
Al llegar al patio de cuadrilla,mi mente retomó el pasado,esa tarde magica en la cual mis zapatillas arian el paseillo por primera vez sobre su albero,aquella tarde de Julio de 2003 en la que di vuelta al ruedo con petición de oreja.Acia años que no pisaba ese mágico patio de caballos,donde afloran los sentimientos mas ocultos,donde,por lo menos a mi,se riza el bello y los ojos,por el esplendor de tan bello y mágico marco,se tornan lagrimosos,donde el corazón late mas deprisa de lo habitual.
Fueron duros los días previos,las horas previas asta que el reloj marco las 10 en punto de la noche,y al abrirse la puerta de cuadrillas y sonar ese pasodoble torero,al sentir nuevamente el calor de sus arcos,el resplandor y el colorido,el bullicio de los asistentes.Que bello fue volver a sentirte,en ese momento no me cambiaba por nadie,fue tan especial y tan torero todo,tan sentido,ese paseillo asta la presidencia,sintiéndome torero nuevamente,soltando los nervios a cada paso,susurrando al silencio entre labios.
DIOS quiera que la vuelva a sentir muchas otras tardes,DIOS quiera que vuelva a asomarme a su anillo y escuchar esas palabras que se escuchan a escasos metros de la primera raya de picar: "SEÑORES,QUE DIOS REPARTA SUERTE".
Nadie podrá robarme estos sentimientos que me afloran del alma,nadie podrá cambiar nunca esas dos mágicas tardes,nadie podrá cambiar nunca el embrujo torero de la REAL MAESTRANZA SEVILLANA.

Ricardo Reina.